De todos es conocido los cantes que se producen en el metro cuando alguien se nos pone al lado brazo arriba para aguantas los efectos de los vaivenes de la inercia, y se hace insoportable el olor y los empujones. Bien es verdad, que los "cantes sobaqueros" no enienden de sexo, raza, religión o lo que sea. Aquí podemos apreciar esta niña, que se le acabó el desodorante "chispitas" y para no ahuyentar a los convecinos de viaje del metro, usa un sistema de "agarre" alternativo para no caer a los efectos de la inercia, y lo más importante, no levantar el ala para matar de olor sobaqueril al resto de viajantes.
Al loro con el "romerales" que está mirando a la niña. Nosotros estamos viendo la parte mecánica del sistema, es decir, barra del metro, culete de la nena y encaje perfecto, pero el tío tendrá el "papo" mirándole directamente, y estará pensando, "soc molt junt per a fer com si caiguera als peus del papo de la noia y arrosegar-li una miqueta, ufff....m'estic imaginant-lo tot embardurnat"
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